Tolima Corazón de Los Andes II
A mediados de 2025 participé en un proyecto increíble, acompañado por un equipo que convirtió esta experiencia en una de las más enriquecedoras de mi carrera como fotógrafo. Mi responsabilidad fue producir el stock de imágenes destinado al uso libre por parte de la población Tolimense, con el propósito de promover el turismo en el departamento, también documentar el detrás de cámaras y en algunas ocasiones ser segunda cámara de grabación.Quiero contarle un poco de mi experiencia y recomendarles algunos lugares que visitamos y ¿por qué no? mostrar mi trabajo.
La idea general del proyecto fue producir seis videos comerciales para promocionar distintas rutas turísticas en el Tolima. Las propuestas creativas y los guiones fueron desarrollados por Juan Felipe Valbuena y Roger Giraldo.
Expedición al Nevado del Tolima
Organización de equipo por parte de nuestros guías desde el punto de partida en Palomar - Anzoategui
En esta primera expedición buscamos capturar momentos de aventura y paisajes que sedujeran al espectador y despertaran el deseo de visitar esos lugares. La travesía comenzó en Palomar, Anzoátegui, y se extendió por cinco días por los páramos del Tolima, entre impresionantes vistas y el cálido trato de la gente local. Físicamente fue exigente, y el clima no nos favoreció durante los primeros dos días, privándonos de las condiciones ideales para las imágenes que imaginábamos.
La primera parada fue en la Finca Vancouver, en donde descansamos en la noche y teníamos la esperanza de ver al amanecer el Nevado del Tolima, sin embargo la montaña tenía otros planes y el día estuvo completamente nublado.
Sin éxito, decidimos dirigirnos al segundo punto: los Termales del Cañón, donde pasaríamos la noche. Mientras la tarde caía, eran alrededor de las cuatro cuando Roger y Juan subieron a un mirador a grabar, pero el cielo estaba cubierto de nubes. Sin embargo, como por milagro, el sol se abrió paso y nos permitió tomar fotos y videos con vistas espectaculares.
Vista del Nevado del Tolima desde Termales de Cañon.
Al llegar a nuestra última parada, las condiciones ambientales nos jugaron en contra: la lluvia y la neblina hacían parecer imposible alcanzar nuestro objetivo principal, que era coronar la cima y obtener imágenes espectaculares del amanecer.
Aún así, el plan se mantenía: con la esperanza de que todo mejorara, a las siete de la noche nos preparamos para dormir, pues a medianoche debíamos levantarnos para iniciar el ascenso. Cuando sonaron las alarmas anunciando la hora de partida, abrimos las carpas con gran expectativa y la montaña pareció sonreírnos, mostrando un cielo despejado y sin pensarlo más de una vez, iniciamos el ascenso.
Debo decir que el ascenso a cumbre con equipos de grabación ha sido de las cosas mas complicadas que hemos hecho, pero valió la pena capturar cada imagen, cada segundo de video y por supuesto, ver todo esto con mis propios ojos.
Paisaje desde el Nevado del Tolima al amanecer
Amanecer desde el Nevado del Tolima
Con estas imágenes doy cierre a esta parte de la aventura, no sin antes recomendarles a @locombiatravel y @montañayroca, quienes fueron nuestros guías durante toda la travesía y con la ayuda de ellos fue posible alcanzar nuestros objetivos.
Frio, pero no tan frio
Una visita al Nevado del Tolima puede ser todo un reto para algunas personas; sin embargo, es posible disfrutar de la belleza de los páramos de forma más accesible. Podemos dirigirnos al municipio de Murillo, conocido por sus paisajes montañosos, su clima frío y su abundante biodiversidad. Allí encontraremos una de las carreteras más hermosas de Colombia, ideal para recorrerla y disfrutar del paisaje; si tenemos suerte, también podremos ver el Nevado del Ruiz.
Definitivamente le frailejon es un emblema del páramo, pero hay una especie vegetal que se alza en el departamento del Tolima, símbolo patrio y es la Palma de Cera. En el Corregimiento de Toche podemos encontrar la concentración más alta de Palma de Cera, viendo bosques completos de esta, cubriendo los otros arboles debajo de sus hojas.
Bosque de Palma de Cera en Toche - Tolima
Tierra caliente e historia
Hasta el momento hemos descendido desde el Nevado hasta el bosque Andino, pero ahora nos dirigimos a tierra caliente con el fin de conocer un poco más de la historia que esconde algunos sitios de gran atractivos turístico en el Tolima.
Fachada de casa en Honda Tolima
Calle de las trampas en Honda
En Honda nos encontramos con un paisaje urbano bastante interesante por su arquitectura colonial y coloridas fachadas que algunos turistas definirán como la “Cartagena del Tolima”. Es un destino interesante para cualquier turista porque combina historia colonial y arquitectura bien conservada con calles empedradas, puentes sobre el río Magdalena y miradores que ofrecen paisajes pintorescos; además su ambiente tranquilo, museos, iglesias y gastronomía local permiten una experiencia cultural auténtica y relajada en poco tiempo.
Durante la producción de este proyecto visitamos el Museo del Río Magdalena, un lugar lleno de historias en torno a este afluente de agua que atraviesa gran parte del territorio colombiano. En este museo encontraremos una colección de objetos históricos que evocan distintas épocas de la región. Las piezas —herramientas, utensilios, fotografías y documentos— nos transportan a tiempos pasados y reconstruyen la vida cotidiana, las tradiciones y el comercio fluvial que marcaron la historia del Magdalena. La disposición museográfica y los relatos que acompañan cada pieza crean una experiencia inmersiva que hace sentir al visitante como si estuviera viajando a través del tiempo, conectando el presente con la memoria colectiva de la cuenca del río.
Museo del Río Magdalena
En Honda también encontramos la Farmacia Nueva Arturo Cerón F., considerada la más antigua de Colombia. Es un lugar emblemático que mantiene viva la tradición farmacéutica del país: fundada en el siglo XIX, su arquitectura colonial guarda frascos de vidrio, balanzas y fórmulas antiguas que te transportan a cuando la botica era también consultorio y punto de encuentro social. Su permanencia habla de la importancia de Honda como puerto del Magdalena y de cómo los saberes locales de salud han perdurado, convirtiendo la farmacia en un atractivo patrimonial que conecta la historia con la vida diaria de la región.
Otro sitio de interés es el Teatro Unión de Honda, es un emblemático espacio cultural que conserva la arquitectura ecléctica de finales del siglo XIX y principios del XX, reflejo de la época de esplendor fluvial de la ciudad; restaurado con esmero, el teatro combina detalles ornamentales, balcones de madera y una sala íntima que acoge obras de teatro, conciertos, eventos comunitarios y proyecciones, funcionando como punto de encuentro para la vida artística local y como testimonio vivo del patrimonio cultural.
Teatro Unión de Honda
La vida nocturna en Honda se caracteriza por una mezcla acogedora entre tradición y sabores locales: los restaurantes del centro histórico, muchos ubicados en casas coloniales restauradas, ofrecen desde platos típicos como el bocachico y la ternera ahumada hasta reinterpretaciones contemporáneas que celebran productos del Magdalena y las montañas cercanas; mientras tanto, las plazas y corredores peatonales se llenan de música en vivo, tertulias alrededor de una cerveza artesanal o un aguardiente regional, y una cultura de encuentro que privilegia la conversación y el disfrute pausado, donde turistas y locales se mezclan en un ambiente seguro y festivo.
Y ahora un pequeño parentesis ¿Cuales fueron los equipos que utilizamos para realizar esta producción ?
Creo que es momento de nombrar cuales fueron los equipos empleados para lograr los resultados que estarán viendo a lo largo de este Blog. como cámara principal empleamos la Sony FX30 con un objetivo 18–105 mm. Aunque esta combinación ofrece una estabilización notable, en algunas tomas recurrimos al estabilizador ZHIYUN Cinepeer Weebill 3E.
Una de las características que más me gustó de esta combinación, fue su portabilidad. Teniendo en cuenta que eran jornadas extensas de grabación y muchas veces pasamos gran parte del tiempo con el equipo al hombro, tener un tamaño y peso reducido fue algo que se agradeció bastante.
Respecto al equipo de fotografía, la Sony a7III fue la cámara principal junto con los objetivos Tamron 17-28 2.8 y 28-75 2.8 que me parecen una gran combinación. En algunas ocasiones también se realizaron grabaciones con esta cámara y objetivos, demostrando un gran desempeño de imagen.
Por otro lado, cuando fue necesario apoyo de luz artificial, utilizamos dos tubos RGB de la marca NINELITE PavoTube II 30C. Son extremadamente portátiles y ofrecen gran versatilidad para adaptarse a distintos tipos de locación.
Las tomas aéreas se realizaron con un DJI Air 3, que nos acompañó durante toda la producción. Sus dos cámaras fueron muy útiles: una con gran angular y otra con zoom, lo que permitió obtener perspectivas variadas.
Otros municipios visitados
Nuestra viaje nos llevó a conocer otros lugares como Ambalema, Purificación y La Chamba. Ambalema es un pueblo ribereño de calles empedradas y casonas coloniales, famoso por su ambiente tranquilo y sus puertos sobre el río Magdalena. Su arquitectura tradicional, plazas sombreadas y atardeceres sobre el río lo convierten en un destino pintoresco para fotografía documental y de paisaje.
Ambalema el pueblo de las mil columnas
Comida típica tolimense en el malecón de Purificación
En La Chamba podemos ver manos curtidas y caras al sol. El día a día —la siembra, la ganadería, la artesanía— se mezcla con la vieja tradición del barro: ollas, tinajas y piezas hechas a mano que cuentan historias de familia y de tierra. El barro no es solo material, es memoria, que se pasa de generación en generación en hornos y patios, mostrando la creatividad y la fuerza de un pueblo que convierte la tierra en cosas útiles y bonitas.
De este viaje aún queda mucho por mostrar, pero por el momento lo dejaré hasta aquí
